Puliendo la TransPirenaica
Desde nuestro punto de partida en Port de la Selva, donde el Mediterráneo nos regala un día espléndido, ponemos rumbo a Andorra.
Besalú, la zona volcánica de la Garrotxa, la collada de Tosses, son nuestros primeros puntos de paso donde conduciendo la moto, disfrutamos tanto del paisaje como de la carretera.
Entramos por un momento en Francia y accedemos a Andorra por el Pas de la Casa, un puerto ancho y divertido. Paradita para comer un arroz de montaña y llegar relajados a buena hora a nuestro hotel pasando y saboreando el Col d´Ordino, donde se te dibuja una sonrisa de oreja a oreja.
Un desayuno bien temprano, ya que tenemos un día apretado. El Cantó y la Bonaigua, dos puertos de peso que nos llevan hasta Vielha, donde hacemos una merecida parada gastronómica.
Entramos rápidamente en tierras galas para conquistar los míticos Cols del Tour, más cómodos y descansados que los ciclistas. Realmente se merecen el monumento en el Tourmalet.
La climatología puede cambiar en cuestión de pocos minutos y como auguraban las previsiones de la meteo, la lluvia y la niebla nos acompañaron a ratos.
Una transpirenaica sin lluvia no sería lo mismo.
Impermeable y a disfrutar del fresco en verano.
Foto de rigor en el último puerto del día y llegada al hotel de Formigal, donde un buen spa nos deja como nuevos.

La noche lluviosa ha dejado paso a una mañana tranquila, como la carretera nacional que nos acerca a un cruce importante. En Puente la Reina vuelve un gran espectáculo. Cruzando cañones y parques naturales, entre frondosos valles. Aquí sonriendo me reafirmo en porque me gusta esto.
Llegados al Roncal, cruzamos Navarra, entre unos espesos bosques que hacen desaparecer la luz.
A las puertas de Guipúzcoa, hacemos noche. Aquí el silencio lo invade todo.
Por la mañana encontramos las motos limpias y a punto .
En poco más de media hora llegamos a lo alto del Jaizkivel, estupendo mirador sobre la desembocadura del Bidasoa en el Cantábrico, entre Hendaya y Hondarríbia.
Ha sido un placer contar con tu compañia. Gran motero y mejor persona. Y ya sabes, el Pirineo es único y diferente a cada ruta.
Un paraiso motero muy cerca de casa.
Saludos!!
Ya más o menos recuperado del «palizón» . Fuera broma ha estado genial, a pesar de las inclemencias del tiempo al final te sabe a poco y me quedo con ganas de más¡¡¡
Para la próxima vez y llevando un route lider como Julio voy a por un viaje personalizado a medida sin dudarlo.
Un placer¡